¿Qué es?
El tendón de Aquiles se encuentra en la cara posterior del pie y parte baja de la pierna y es el que conecta los músculos de la pantorrilla con el hueso del talón, ayuda en la marcha, al correr y saltar. Es una lesión por sobrecarga del tendón de Aquiles.
Los casos más graves de tendinitis aquiliana pueden provocar desgarros en el tendón (roturas).
¿Qué síntomas y signos presenta?
Los síntomas y signos más frecuentes son:
- Dolor leve por encima del talón y la parte baja de la pierna, luego de realizar algún tipo de actividad física como correr.
- Dolor a nivel del tendón de Aquiles, que aumenta con la actividad y cede al reposo.
- Sensibilidad al tacto.
- La movilidad de la articulación del tobillo es completa, pero con dolor.
- Inflamación en la zona del tendón de Aquiles.
- Debilidad muscular en la pierna afectada.
¿Por qué se produce?
Puede ser por:
- Debilidad muscular en músculos de la pierna.
- La intensidad con la que se corre o salta, si es que es muy brusco.
- Cambiar de manera repentina y brusca al correr.
- Correr sobre suelo irregular o superficies inclinadas.
- Realizar ejercicios o algún entrenamiento luego de un periodo de inactividad.
En deportes:
Puede ser causado en atletismo, tenis (por las frenadas bruscas), fútbol, en corredores que aumentan la intensidad o la duración de sus carreras de manera repentina, también en saltos, en corredores de fines de semana.
¿Cómo prevenirlo?
- Realizar ejercicios de estiramiento antes y después de la actividad deportiva, para mantener el tendón flexible.
- Usar un buen calzado para la actividad que practique.
- No parar bruscamente luego de correr.
- Descansar si es que presenta fatiga.
- Realizar un adecuado tratamiento de Terapia Física y Rehabilitación para poder retomar sus actividades.
- Evitar en lo posible hacer deportes sólo una vez por semana, debido a que el sedentarismo aumenta la probabilidad de lesiones.
Autora: Lic. Carmen Paredes
Terapeuta Físico